Eso sí, la recepción la cierran a las 7 p.m y nos hemos quedado sin Internet, por eso no hemos podido actualizaros antes.
En este pueblo hay unas casas preciosas con enormes ventanales que dan al mar y unos jardines públicos tan cuidados que te da la sensación de estarte colando en casa del alguien.
Ya vamos tomando colorcillo en la playa, aunque usamos protección 30 (es lo mínimo que venden aquí). Mañana tomaremos fuerzas antes de emprender viaje hacia los frescores neozelandeses.
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Collaroy |
1 comentario:
Pero chicas... ¡cómo vivís!
Que digo yo una cosa: y esos chicos no se pasarán por Madrid en breve no? Por si acaso dales nuestra dirección para hacerles su llegada más llevadera.
Je je
Un beso a las dos
DAVID
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